Halloween: La noche final – Reseña

Un último enfrentamiento

En 1978 el subgénero por excelencia del terror conocido como el slasher, cobraba una relevancia importante con Halloween de John Carpenter, estableciendo las reglas del juego para este tipo de cintas y llevando a la fama a su protagonista, Jamie Lee Curtis y la ‘final girl’ por excelencia, Laurie Strode. 44 años después, el ciclo llega a su fin con Halloween: La Noche Final, un último enfrentamiento entre iconos del cine que, desde su revival en el 2018, levantaba expectativas tremendas para una saga tan inmortal como su malvado antagonista.

Después de una segunda parte llena de violencia pero que traicionaba un poco ese realismo planteado por la cinta del 2018, David Gordon Green, que tomó la estafeta de buena forma y se fue desinflando en el camino, ofrece una resolución que resulta no sólo una de las más flojas de toda la franquicia de Halloween, sino una que deja un vacío de decepción tremendo para una leyenda del terror como lo es Michael Myers, normalmente compartiendo lugar con engendros icónicos como Jason, Leatherface o Krueger.

La premisa comienza un año después de lo sucedido en Kills, donde el joven atribulado e intelectual de nombre Corey (Rohan Campbell) tiene un incidente que lo marca de por vida, justo después de la desaparición del aparentemente inmortal y misterioso Myers. Esto hará que su vida dé un giro al estilo Haddonfield que lo guiará a encontrase en el camino con una oscuridad inherente en él, similar a lo planteado antes por el Doctor Loomis (Donald Pleasance), que traerá de vuelta a la pesadilla de Halloween.

Mientras, Laurie está rehabilitada y sigue por fin su vida al lado de su nieta en una aparente paz en este pueblo maldito que se rompe de súbito cuando la sangre vuelve a correr en Haddonfield, con esta poderosa y diabólica figura buscando venganza, tejiendo lentamente el camino hacia el soñado enfrentamiento final de Myers y Strode.

La premisa juega con una idea que resulta interesante pero Gordon Green y sus colegas guionistas comienzan a dar de tumbos al traicionar la esencia no sólo del slasher mismo, sino de la mitología del personaje al que trataron de reivindicar (Myers) y su enemiga a muerte (Laurie Strode), no pudiendo definir el rumbo ante lo que proponen en este duelo final y dejando todo como un relato de amor cursi y violento que remite a una edulcolorada versión de Mickey y Mallory Knox en Asesinos por Naturaleza (Stone, 1994).

Si bien existe este factor sobrenatural que ha rodeado a Michael desde siempre, más allá de la pura maldad definida desde 1978, en este final tan esperado de una rivalidad que marcó al género del terror, trataron de ir por un rumbo que tuviera cierta congruencia pero lo sobrenatural y el realismo nunca conjugan de buena forma con cosas que simplemente pasan porque sí y donde el camino que parecían pavimentar es abandonado abruptamente para tener uno de los peores finales de la saga desde la infame trilogía de Halloween 5, 6 y 7 hasta la horripilante Resurrección.

Pero incluso ninguna de ellas le falta al respeto a esa curiosa mística de Myers, solamente le daba una explicación tan burda que daba risa o unos finales tan indignos que se andan dando un tú por tú con algunos otros iconos del horror como Jason X o la reciente ‘recuela’ de La Masacre de Texas en Netflix. Es eso lo que entierra la daga final en un personaje, dando como resultado la cuchillada final suficiente para rasgar vestiduras de los fans y amantes del terror por igual.

Aunque Jamie Lee Curtis está muy bien como Laurie Strode, su personaje tiene un salto abrupto que no está del todo bien planteado, tomando como justificación ese salto de tiempo que maneja este ‘final’, arrebatándole esa fiereza a la que nos había acostumbrado para mostrarse mucho más zen. Y los primeros 15 minutos del filme, posiblemente de lo mejor de la cinta, no encuentran buen rumbo debido a lo fallos tremendos de la historia.

Incluso Andi Matichak y Rohan Campbell tienen una extraña química que, por desgracia, nunca termina por detonar y que se convierte en una narrativa tremendamente cursi que incluso tendría más sentido de no ser por una resolución floja, absurda y digna del olvido para una franquicia que, con esta nueva trilogía, apuntaba para algo grande pero que acabó por diluirse de fea forma.

Claro que existen muertes brutales, incluso la música de los Carpenter (John y Cody) acompañados de Daniel A. Davies, son aspectos que siempre dan algo de qué hablar. Vaya, hasta el trabajo de fotografía de Michael Simmonds para ciertas atmósferas y una edición que encuentra sus trabucos en el mal desarrollo del relato, pasan a segundo término al presenciar este desenlace.

Trailer oficial de Halloween: La noche final / Universal Pictures México

Conclusión

El odio entre Michael Myers y Laurie Strode llega a este punto que a todas luces se percibe como anticlimático, dejándonos una lección importante acerca de estas nuevas versiones para no ser repetida a futuro: siempre ser fiel a la mitología de un personaje así de icónico y al amor de los fans por una saga que ha tenido sus altos y bajos. Toca el turno de ver si David Gordon Green aprende la lección para la siguiente ‘recuela’ en sus manos, El Exorcista. 

Sobre el autor

Ficha Técnica

  • Título original: Halloween Ends
  • Dirección: David Gordon Green
  • Guion: David Gordon Green, Danny McBride, Chris Bernier, Paul Brad Logan
  • Reparto: Jamie Lee Curtis, Rohan Campbell, James Jude Courtney
  • Duración: 111 min.
  • País: EUA
  • Año: 2022