La Casa Gucci – Reseña

En el nombre del padre, del hijo y Gucci

Las dinastías de toda índole, guardan secretos e historias que causan un interés infinito tanto para periodistas como público en general. El origen, la cumbre de su grandeza y la, muchas veces, inevitable caída, ofrecen relatos que todas las disciplinas estudian, plasman pero sobre todo, vuelven inmortales en el interés de una sociedad que aprende, se apasiona o toma como modelo de referencia.

Gucci, marca de ropa y accesorios de lujo, posee la grandeza suficiente para que un director como Ridley Scott, componga una super producción que ponga en el ojo público un suceso que sacudió al mundo de la moda como lo fue el asesinato de Maurizio Gucci, el último de la gran casa italiana. Si bien, la vara que dejó El Último Duelo no es superada, lo cierto es que la calidad en lo técnico y la siempre bienvenida valentía por ofrecer cintas o producciones diferentes se reconoce y agradece en La Casa Gucci.

La Casa Gucci estrena en cines el 24 de noviembre. Compra tus boletos en este enlace.

La cinta, basada en la novela The House of Gucci: A Sensational Story of Murder, Madness, Glamour, and Greed de Sara Gay Forden, narra la decadencia de la Familia Gucci que se puso en marcha con la entrada de Patrizia Reggiani gracias a su matrimonio con Maurizio, siendo ella el detonante para que la ambición y la traición destrocen los lazos familiares, sacudan todo un imperio pero sobre todo, alimenten todo un ecosistema de extravagantes capítulos en la historia de la cultura pop tanto de Italia como del mundo 

En la segunda cinta en el 2021 del cineasta responsable de grandes titulos como Alien: el octavo pasajero, Thelma y Louis, Gladiator o Blade Runner, se confirma su versatilidad y hambre creativa para tocar distintos temas, abordados de diversas maneras pero con la calidad técnica permanente, sello de Scott.

Los vestuarios, las locaciones y la selección musical permiten disfrutar del glamour que trae consigo la marca Gucci, símbolo de una elegancia que ya no era bienvenida en una industria que buscaba nuevas propuestas, tema que está bien reflejado en la presión y decisiones que toma Maurizio. Ilustra, además, los demonios que las familias poderosas y con grandes legados por salvaguardar debían combatir pero que la caída es inevitable, siendo sus propios verdugos.

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Las actuaciones exageradas, por muchos momentos sobreactuadas, desequilibran la narración, haciendo aún más densa la experiencia y a la vez, apegada a la manera de ser de las personas reales. Lady Gaga hace suyo el papel de la excéntrica Patrizia, se le ve cómoda, haciendo una buena labor. Adam Driver, se pone muy serio como Maurizio, sin destacar realmente. Jared Leto representa al extremo el patetismo del mediocre soñador y aspirador a diseñador Paolo Gucci, primo de Maurizio, siendo el personaje más sobreactuado y con la transformación más radical (trabajo de maquillaje sobresaliente). Jeremy Irons aunque de breve participación, dota a su Adolfo Gucci, padre de Maurizio, una elegancia sin igual. Y Al Pacino que es el que más brilla como Aldo Gucci, robándose cada escena en la que está involucrado, ofreciendo una interpretación a la altura de sus mejores papeles.

Pese a sus virtudes, la cinta está narrada de una manera densa, con mucho relleno basado en ideas sin concretar, involucrando escenas que van desde una historia de amor hasta un relato de mafia. Los acentos resultan excesivos y la edición abrupta no ayuda a que la historia fluya, perdiendo al espectador en la cronología.

Conclusión

La Casa Gucci es una ambiciosa propuesta que no termina por encontrar su camino. Técnicamente superior y con un elenco llamativo, sin duda es una opción que vale la pena ver en salas de cine si tienes la suficiente paciencia y apego a los detalles con un glamour oscuro.

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