La relación entre la televisión y el cine siempre ha existido y suele ser bastante productiva toda vez que algunos filmes hacen la transición hacia series de televisión exitosas donde tenemos ejemplos interesantes como MASH (Altman, 1970), convertida en una serie que duró 11 temporadas o Buffy la Cazavampiros (Rubel Kuzui, 1992) que duró 7 años al aire o en años más recientes como Fargo (Hermanos Coen, 1996), entre otros.
Sin embargo, hay casos donde de una serie de televisión salga una adaptación en pantalla grande digna de su material original, como El Fugitivo (Davis, 1993) que logró un par de nominaciones al Oscar e incluso le valió a Tommy Lee Jones ganar el premio a Mejor Actor de Reparto, o la saga vigente de Misión: Imposible con Tom Cruise a la cabeza que ha sabido explotar y llevar a otras instancias la premisa del serial en que se basa.
Es en este ámbito donde incursiona ahora la cinta de Downton Abbey, dirigida por Michael Engler, quien se aventura a llevar el mundo de una serie de TV inglesa de época a la pantalla grande que duró 6 temporadas y que acumuló premios y nominaciones importantes en el marco televisivo pero que fue un tanto ignorada por las series contra las que llegó a competir, llámese Breaking Bad (2008-2013), Mad Men (2007-2015) o Game of Thrones (2011-2019).
La premisa de la película nos mete de lleno a la dinámica de la familia Crawley, dueños de Downton Abbey que han tenido que enfrentar diversos cambios y situaciones dramáticas en su historia así como a su servidumbre quienes también han ido poco a poco encarando lo que la Inglaterra de los años 20 ha traído consigo. Ahora, este ensamble de personajes tendrá una prueba dura al enterarse de que tendrán el privilegio de recibir una visita de la realeza y las complicaciones que esto acarrea.
Antes que nada hay que aclarar algo. Si bien la cinta se desprende y continúa con el relato de los integrantes de Downton así como con sus respectivos arcos argumentales, la película resulta disfrutable tanto para los seguidores de la serie como para los que tienen un primer acercamiento con la misma, ya que el relato que nos plantea el showrunner y guionista Julian Fellowes cumple en mostrar un buen planteamiento, un desarrollo con su respectivo climax y una bella conclusión al estilo de la serie.
Es así que la audiencia que no está familiarizada con la serie puede pensar que no tendrá razones para crear un vínculo empático con los personajes, eso no es del todo cierto ya que aunque los problemas que plantean pueden llegar a ser un tanto simples, la dirección de Engler y el trabajo de escritura de Fellowes logra que te metas de lleno en la dinámica de esta familia reforzándose además en la gran química que se respira entre todos los miembros del cast.
Y es que en el ámbito actoral todo fluye de manera buena. Podemos ver a todos ellos meterse de nuevo en la piel de sus personajes, cada quien con sus características distintivas y que de alguna manera generan emoción en el relato que vemos. Pero sin duda es la señora Maggie Smith en su papel de la abuela chapada a la antigua, Violet Crawley, la que se lleva las palmas con su actitud, sus bromas, su presencia y la dinámica que tiene con la mayoría de los demás personajes.
Destaca la labor de Fellowes en el guión ya que sigue tocando los temas clásicos de la serie como el choque de clases sociales, la modernidad y la familia, entre otros que ayudan a profundizar en la época en que todo se desarrolla sin sentirse forzados y que sin duda a los seguidores de la serie les encantarán. Pero también ofrece un par de subtramas interesantes que van desde la homosexualidad y lo mal vista que era en ese momento así como una peculiar batalla entre la servidumbre que refleja justamente el dilema de las clases altas y bajas de manera efectiva más alla de la simpleza en el argumento principal.
Los niveles de producción son muy destacados ya que conservan la esencia del programa televisivo, incluso se siente como si la cinta remitiera a aquellos especiales navideños con los que solían cerrar las temporadas pero está vez llevado a un lenguaje aún más cinemático sacándole jugo al mayor presupuesto que te da el realizar una película. El diseño de arte y los vestuarios son dignos de cualquier cinta de época además de la musicalización que también remite a su origen televisivo llenando de nostalgia a los fans y de un producto muy bien cuidado para los primerizos.
Al final, Downton Abbey es una cinta que funciona como un cierre maravilloso para los seguidores de la serie respetando la esencia de la misma trasladándola correctamente a la pantalla grande. Sin embargo también resulta una buena feel good movie que tiene personajes emotivos, con una historia simple pero funcional y que puede funcionar no tanto como un cierre sino como una introducción hacia el mundo de la familia Crawley y su historia completa, poniéndola así como una muy buena propuesta que supo dar el paso de la pantalla chica hacia la grande.
Sobre el autor
Ficha Técnica
- Director: Michael Engler
- Guion: Julian Fellowes
- Reparto: Matthew Goode, Tuppence Middleton, Maggie Smith