Una despedida olvidable para la Viuda Negra
Hace poco más de 10 años nadie se esperaba el impacto que la primer película de Iron Man tendría no solo a nivel cinematográfico sino en taquilla, abriendo paso a un universo de posibilidades infinitas en que el género de los superhéroes, específicamente del lado de Marvel, marcaría a una generación entera.
Sin embargo, la representación y la diversidad no fue alcanzada como una posibilidad real para Marvel sino hasta el lanzamiento de Pantera Negra (2018) o la llegada de Capitana Marvel (2019) donde éramos testigos no solo de las historias de personajes no tan populares en este universo del cómic y el cine, sino de una representación más abierta (y a veces forzada) de este mundo de superhéroes. En el limbo quedó entonces una de las heroínas que, sin necesidad de superpoderes, había conquistado en sus pocas apariciones a la audiencia: ni mas ni menos que Viuda Negra, interpretada por Scarlett Johansson, aquella que en su traje clásico negro llegaba para salvarle el trasero a Tony Stark y compañía de algunos males más mundanos.
Después de mucho tiempo de retraso y con el conocimiento del funesto destino que la Viuda Negra tiene en este universo marvelita en cines, por fin la espía de origen ruso tiene su oportunidad en un largometraje individual donde, lamentablemente, no acaba por lucir del todo bien.
Al viejo estilo de las cintas de espionaje de los 70s
La premisa nos lleva a la infancia de Natasha Romanoff en la que conocemos a su “familia”, completada por su hermana Yelena así como sus padres, Melina y Alexei, dándonos un vistazo de la extraña relación que hay entre ellos para después dar un salto en el tiempo al punto intermedio entre Civil War (2016) y Avengers: Infinity War (2018), en la que, perseguida por violar los acuerdos de Sokovia, Natasha se reencontrará con viejos conocidos para terminar con una amenaza que se erige sobre el mundo.
La directora australiana Cate Shortland trata de recuperar el viejo estilo de las cintas de espionaje de los 70s, especialmente las de James Bond (véase la clara alusión a ellas en una escena) para trasladarlo al relato de Black Widow pero demuestra cierta inexperiencia al tratar de mezclar acción con comedia e incluso suspenso que no siempre es tan bien llevado.
Si bien Natasha Romanoff es una espía rusa y fue entrenada como tal, aquí lo que menos vemos es ese tipo de dinámicas, mismas que son intercambiadas por una curiosa química familiar, especialmente entre la protagonista y su hermana ya crecida, interpretada por Florence Pugh, que más allá de tratar de resolver un misterio se dedican a patear traseros y hacer unos cuantos chistes.
Aunque Scarlett Johansson es una muy buena Viuda Negra, es triste que en su propia cinta se vea opacada por el talento de Florence Pugh, joven actriz que poco a poco va creando una carrera interesante y que, en este filme, se lleva por completo la película, opacando incluso a David Harbour o a la ganadora del Óscar, Rachel Weisz, logrando que cuando aparece en el filme, la cinta se sostenga.
Lo que llega a Disney+ en julio de 2021
En cuanto a la acción, pareciera que Shortland se toma el papel con demasiadas libertades fantasiosas, restándole cierta credibilidad al personaje de Viuda Negra como lo conocíamos para aquí volverla prácticamente indestructible, cayendo de grandes alturas sin tener un solo rasguño o manteniendo su pose de heroína con todo y movimiento de cabeza, algo a lo que hace alusión Yelena en un chiste muy a lo Deadpool (2016).
De nueva cuenta, Marvel desaprovecha las figuras de los villanos tanto en Taskmaster como en el malvado Dreykov. A este general ruso lo hace una caricatura un tanto machista mientras que a ese icónico antagonista de la Viuda Negra le roba toda la esencia de ser el gran rival de nuestra aplaudida heroína, desmitificándolo de mala forma.
Algo que si funciona en esta cinta es la representación femenina. Más allá de los problemas en la dirección y en el ritmo que podamos encontrar dentro de la película individual de la Viuda, este enfoque se siente un poco más orgánico sin dejar de ser Disney, que parece reuhuirle a las muertes y que, al menos con el universo Marvel, siempre repite las fórmulas que le funcionan sin tomar demasiados riesgos.
Conclusión
Black Widow es la primera cinta de la cuarta fase de este universo que Marvel y Disney han creado, sin embargo no deja de sentirse desfasada, fuera de tiempo. Durante su duración, no se deja de sentir que hubiera funcionado mucho mejor en otra fase, dándole la oportunidad a Johansson de brillar como merecía en esta larga saga cinematográfica.
Sin embargo, el resultado es una simple cinta de acción y espionaje que se siente a todas luces tardía. Aunque cumple el cometido de entretener y no se ubica entre las peores películas de superhéroes de la casa de las ideas, definitivamente a Black Widow le falta un poco más de corazón, algo que parece ser la principal problemática de esta época de transición para el Universo Cinematográfico de Marvel, regalándonos una despedida un tanto triste y no tan meritoria como se esperaba.
Sobre el autor
Ficha Técnica
- Dirección: Cate Shortland
- Guion: Eric Pearson. Historia de Jac Schaeffer y Ned Benson.
- Reparto: Scarlett Johansson, Florence Pugh, Rachel Weisz
- Duración: 133 min.
- País: EUA
- Año: 2021