Los efectos de la guerra a través de lo femenino
Las épocas anteriores o posteriores a los conflictos bélicos más importantes, resultan en una fuente de ideas e historias que llegan a ser ideales para montar en lo cinematográfico y literario dramas que llevan a la palestra personajes que se vuelven universales y atemporales.
Tal es el caso de Beanpole: Una Gran Mujer, una cinta rusa que retrata un relato que además de presentar el papel fundamental de la mujer en la reconstrucción tras la Segunda Guerra Mundial, visibiliza de una bella manera los diversos dilemas que vienen con la feminidad en un ambiente donde la dureza de la vida era cruel.
Tras el asedio de Leningrado de 1945, dos amigas excombatientes del Ejército Rojo entran a trabajar en un hospital. Una de ellas es Dylda, que tiene problemas de parálisis crónica, y ha matado de forma inconsciente al hijo de tres años de Masha, quien ya no puede concebir. Masha pedirá a Dylda que se quede embarazada por ella para enmendar su error.
Kantemir Balágov se ha ganado el apodo de “niño prodigio del cine ruso” gracias a su gran talento y propuestas que demuestran un oficio de alto calibre, así como de un potencial impresionante. Esto se confirma con esta cinta, la segunda en su corta carrera, donde demuestra un manejo interesante de la cámara para transmitir las diferentes emociones, principalmente las de Dylda.
A lo anterior se suma un excelente y minimalista diseño de producción que logra meter de lleno a la época de posguerra, aprovechando luces cálidas para dar un sentido distinto al clima perpetuamente frío de la Rusia de aquellos años.
Viktoria Miroshnichenko interpreta a la tímida pero leal Dylda, que además de una estatura fuera de la media, sufre de parálisis crónica y un miedo por quedarse sin su amiga más cercana. Vasilisa Perelygina, encarna a la atrevida, decidida y fuerte Masha, contraparte de Dylda y quién no puede tener hijos tras sus heridas en la guerra, además de sufrir la muerte accidental de su hijo Pashka, consecuencia de uno de los episodios de parálisis de su amiga.
La frialdad del entorno que determina el carácter tanto de los personajes como de las situaciones logra un contraste efectivo para la personalidad de las dos protagonistas, ambas portavoces de los dilemas emocionales, fisiológicos y laborales que toda mujer atraviesa sin importar la época.
Como puntos negativos encontramos un ritmo lento que tiene momentos muertos, una narrativa que se ve entorpecida por algunos excesos o reiteración de situaciones y un guión que en ocasiones no es tan claro en lo visual.
Conclusión
Beanpole: Una Gran Mujer es un gran ejercicio cinematográfico que demuestra que los temas femeninos no requieren de falso empoderamiento ni tramas clichés. Si bien los excesos condenan a la cinta, lo cierto es que resulta en una propuesta ideal para la muestra de la Cineteca, recordando que todavía quedan historias por contar y que pueden venir de los países menos esperados.
Sobre el autor
Ficha Técnica
- Título original: Dylda
- Dirección: Kantemir Balagov
- Guion: Kantemir Balagov, Aleksandr Terekhov
- Reparto: Viktoria Miroshnichenko, Vasilisa Perelygina, Konstantin Balakirev, Andrey Bykov
- Fotografía: Kseniya Sereda
- Duración: 137 min.
- País: Rusia
- Año: 2019