Pudo haber sigo genial
Luego de un largo recorrido que emulaba a la perfección las épocas más icónicas de la televisión, desde los años 50 con el show de Dick Van Dyke, hasta años más recientes con la sitcom Modern Family, después de siete episodios, WandaVision llegó a un punto de quiebre en donde era inminente la resolución definitiva a las preguntas que se formularon mucho antes de que iniciara la serie.
Tras el estreno del octavo episodio en donde conocemos con mayor profundidad los orígenes de los poderes de Wanda Maximoff, sus recuerdos, su atormentada mente pero sobre todo, logramos empatizar con los motivos que llevaron a la superheroína a crear su mundo de fantasía con las sitcoms que solía ver en su infancia. Para ese punto, la serie ya se encontraba en su punto más álgido que no hizo más que aumentar las expectativas para un final digno de ser recordado.
Desafortunadamente, WandaVision tal vez sea más recordada por lo que pudo haber sido más que por lo que en realidad fue.
No es culpa de los fans
La trama era sencilla: después de los eventos traumáticos de Endgame, lo único que le queda a Wanda Maximoff es poder fantasear con un mundo perfecto al lado del gran amor de su vida, el sintezoide Vision. Esta es la historia de una mujer que se niega a procesar el duelo, pues una vez que lo haga tendrá que despedirse de forma definitiva de lo que alguna vez le trajo felicidad, de ahí que tenga que recurrir a la manipulación de sus poderes para construir un mundo que no es real y de paso, utilizar a los inocentes habitantes de un pueblo de Nueva Jersey como sus marionetas.
La humanidad y la complejidad que proponía la serie en su primer y segundo acto estaban convirtiéndola en una de las mejores propuestas argumentales de Marvel desde que inició la franquicia al colocar a Wanda como la propia villana de su historia, sin embargo, la serie se traiciona a sí misma e inclusive a la propuesta de la segunda parte de Doctor Strange cuando se nos revela que la verdadera villana es Agatha Harkness y otro factor más…
Empecemos con el factor más importante que frenó su ascenso exponencial: El Manual de Marvel.
La presencia de este manual para el desarrollo de sus cintas sale a relucir casi en el desenlace cuando vemos tanto al villano forzado como el inevitable enfrentamiento con el héroe, también cuando sucede la obligada batalla final, que si bien resulta entretenida por los numerosos efectos especiales y la calidad de los mismos, no es mas que un punto más para la fórmula mágica de los éxitos masivos de la compañía del ratón.
Y otro factor más se encuentra en el mismo cierre entre Wanda y Vision. A pesar de que es un hecho que nos dirigíamos hasta este punto sin retorno, el que desde un inicio se vendiera a la serie como la conexión directa con Doctor Strange in the Multiverse of Madness por ser Wanda la futura villana principal, hace que no resulte lógico o creíble que la ahora Bruja Escarlata sacrifique tan fácilmente a su familia con tal de liberar a los habitantes de Westview.
Este tipo de inconsistencias en la trama principal son sus principales puntos débiles, además de las subtramas que no logra concretar. Marvel demuestra una vez más que abarca mucho pero aprieta poco, la ejecución de su final es tan pobre que no hay posibilidad para las sopresas, ni Mephisto ni Doctor Strange podían salvar el decepcionante final hacia dónde se dirigía la serie.
Conclusión
WandaVision se añade a la lista de los productos más entretenidos y exitosos de la compañía multimillonaria del momento, no por su arriesgada propuesta narrativa sino por demostrar una vez más que lo más seguro es seguir siempre la fórmula, sólo que en esta ocasión, Marvel se creyó con la suficiente astucia para pasar desapercibido al verdadero antagonista de esta historia: las estrategias tramposas de marketing.
No contó con que sería más evidente para unos que para otros, por ello, el que hubiera una apertura a la teorización con referencias a los cómics como la mosca que parecía ser la ansiada aparición de Mephisto o el posible inicio del multiverso con la llegada del Quick Silver de la saga de los X-Men de la extinta compañía FOX, no eran cortinas de humo de las que Marvel no estuviera consciente, todo lo contrario. Cumplían el propósito de elevar los ánimos de la audiencia. Sería poco ético culpar por completo a los fans de tener las expectativas hasta los cielos cuando desde un inicio, se hizo todo para llevarlos por ese rumbo.
En fin, sólo nos queda esperar para ver hacia dónde se dirige ahora la historia de la Bruja Escarlata en Spiderman: No Way Home y Doctor Strange in the Multiverse of Madness.
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