En el juego del asesino

Una premisa que daba para más

El juego del asesino se trata de la ópera prima, tanto en dirección como en guión, de David Raymond. La película narra la historia del detective Walter Marshall (Henry Cavill), en su búsqueda por frenar la cacería de un asesino en serie (Brendan Fletcher), pero siempre se queda un paso atrás de la siniestra mente responsable de múltiples raptos y depravaciones que tienen como blanco principal a mujeres jóvenes.

Desde el primer minuto, la cinta nos indica claramente que su intención es abordar un thriller, al mostrar una escena con música tensa, ambiente oscuro y una chica corriendo de un misterioso agresor a la mitad del bosque. Seguidamente, nos presentan a Marshall, un policía con dificultad para ponerse en contacto con sus emociones y que además tiene que lidiar con una hija preadolescente (Emma Tremblay). Después, viene un dúo formado por un juez retirado llamado Michael Cooper (Ben Kingsley) y Lara (Eliana Jones), que resultan ser cazadores de hombres mayores a los que les gusta seducir a chicas más jóvenes que ellos.

En un inicio, la premisa pareciera prometer una historia de suspenso que habla acerca del poder del hombre en búsqueda de la sumisión sexual de la mujer, una historia que, para ser sinceros, le queda como anillo al dedo a la sociedad mexicana. Dicha propuesta argumentativa desaparece repentinamente, pues todavía no comienza el segundo acto cuando nos plantea un nuevo conflicto. El resto de la película viene siendo una persecución entre un asesino en serie y un departamento de policías desesperados por descubrir el modus operandi de su antagonista (Parecido a lo visto en Seven (1995), de David Fincher).

La inspiración de Raymond para crear esta historia es evidente a lo largo del filme, pues es difícil no ver las referencias a otras cintas del género (además de la ya mencionada Seven) como El silencio de los inocentes (1991) o Fragmentado (2017). Dichas semejanzas narrativas se hacen notar cuando tenemos al actor Brendan Fletcher en pantalla, siendo su interpretación el elemento más fuerte de la película. Basta con verlo usar la gesticulación de su rostro y su lenguaje corporal para hacernos sentir la demencia y malicia de su personaje.

Son varios los puntos perjudiciales de En el juego del asesino, comenzando con la relación padre e hija entre Henry Cavill y Emma Tremblay. Todos podemos ver a Henry Cavill como un papucho, pero como padre de familia es un poco más difícil, después, el nulo parecido físico entre ambos actores hace que la relación no tenga química en pantalla y, por ende, es poco creíble. Lo más desfavorable de la relación entre estos dos personajes es que resulta intrascendente para la trama, pues el detective Marshall podría no tener hija y la historia seguiría funcionando igual.

Tampoco se hace un retrato decente de la mujer en el trabajo. En El Silencio de los inocentes, podemos ver a Clarice Starling (Jodie Foster) desempeñarse con gran eficacia en su campo de trabajo a pesar de ser constantemente subestimada por los hombres pertenecientes a su gremio. Aquí, el personaje de Rachel (Alexandra Daddario) es retratada poco menos que inútil, pues cualquier situación siempre se le sale de control y tiene que ser rescatada por Cavill.

Finalmente, David Raymond intenta sorprender a la audiencia utilizando en varias ocasiones el recurso del plot twist, que lejos de causar el efecto deseado, solamente termina haciendo un enredo innecesario en la historia, que puede dejar al público confundido.

Dark Side Distribution

Conclusión

La película cuya propuesta inicial daba para sacar mucho jugo, pues hubiera podido tocar temas transgresores, como el feminicidio o el acoso a las mujeres, por ejemplo. Sin embargo, el resultado final es un copy/paste de otras cintas exitosas en su género, pero la forma en la que están acomodadas para contar esta historia no resulta tan efectiva. Además, con alerta de spoiler, si tienen ganas de ver a Henry Cavill mostrando su escultural cuerpo en pantalla, se van a quedar con las ganas.

Sobre el autor

Ficha Técnica

  • Director: David Raymond
  • Guion: David Raymond
  • Elenco: Henry Cavill, Ben Kingsley, Alexandra Daddario