El culpable

Nada es lo que parece.

El cine nórdico es de los más importantes en el continente europeo gracias a la gama de filmes que entregan. Películas que vienen de Noruega, Islandia o Finlandia, y que han influido incluso al cine mundial, teniendo presencia en festivales de todo tipo y dando siempre de que hablar.

Sin embargo, uno de esos países lleva delantera en cuanto a la importancia e influencia en el mundo del séptimo arte y ese es Dinamarca, país que, junto a Suecia, ha sido estandarte para el séptimo arte durante los últimos años. Cuna de directores como Susanne Bier, Thomas Vinterberg, o el infame Lars Von Trier, las producciones danesas han sido reconocidas cada vez más.

Así, este año llega a cines mexicanos gracias a Cinemex la película El Culpable, de Gustav Moller, ópera prima de este director danés realizada con bajo presupuesto y con una premisa sencilla pero tremendamente efectiva, que resulta ser sorpresiva por su sencillez en una cartelera donde los excesos y los blockbuster abundan.

Estamos ante la historia de Asger (Jakob Cedergren), un agente de policía que atiende llamadas de emergencia en Dinamarca. Su noche parece ser tranquila, lidiando con lo usual de su trabajo, hasta que recibe una llamada de una chica de nombre Iben, la cual hará que su turno de un giro inesperado que lo llevará a enfrentar hasta sus propios secretos, enfrentándose a situaciones donde nada es lo que parece ser.

La cinta es sencilla ya que nos ubica exclusivamente en la oficina de Asger, es decir, solamente lo vemos a él a cuadro. Vivimos con el durante la hora y veinte minutos de duración todo este frenético viaje que lo lleva por decisiones y caminos desconocidos, recargando toda la emoción en el actor principal, Cedergren, que realiza una labor destacada y transmite todo lo que siente y vive en este thriller.

Si bien no es algo que no se haya visto antes, el guión se desenvuelve de una manera tan tensa que, ayudado de las tablas actorales de Cedergren, nos contagia y mete de lleno ante las eventualidades, dando uno que otro giro de tuerca hasta el clímax donde se revelan las verdades de los personajes. Y es que en si, esta pequeña película nos remite a aquella obra del 2013 llamada Locke, dirigida y escrita por Steven Knight, donde Tom Hardy hacia lujo de su dote actoral al seguirlo por una sola noche en un viaje por auto, enfrentando las dificultades que la noche le devela.

Aunque la premisa pueda no ser del todo original, sin duda El Culpable funciona como ejemplo de como una cinta bien escrita, bien actuada y bien dirigida puede llegar a ser uno de los mejores thrillers del año. Cabe mencionar que la película representó este año a Dinamarca para las nominaciones al Oscar, además de haber ganado el Premio del Público en Sundance 2018 por Mejor Película Dramática en la categoría World Cinema.

Sin duda, este novel director promete seguir la escuela del cine danés propositivo, ese que los ha llevado a ganar premios Oscar por cintas como El Festín De Babette (Gabriel Axel, 1987) y En Un Mundo Mejor (Susanne Bier, 2010) y a crear corrientes revolucionarias como el Dogma 95. Así, El Culpable es un gran thriller donde la sencillez de su realización resalta las grandes virtudes del filme.

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