Cuando Hutchence y el rock/pop conquistaron Wembley
No cabe duda que en la década de los ochentas la oferta musical nos entregó a bandas y nombres icónicos. Algunos se mantienen vigentes a la fecha y otros ya dejaron huella en su largo o breve paso por la farándula. Ahí tenemos a The Smiths con la genialidad depresiva de Morrisey, los Talking Heads y la experimentación del genio David Byrne o Joy Division y la tragedia de Ian Curtis que frenó su impulso.
Entre los que siguen vigentes está Metallica y su metal de garage liderado por Hetfield y Ulrich, Depeche Mode y sus ritmos de electro rock sonando al compás de lq voz de Dave Gahan o U2, la banda irlandesa por excelencia de Bono que sigue moviendo masas con sus clásicos. Sin embargo hay una banda que junto a estos grandes nombres tuvo su gran momento en la segunda mitad de los 80 para desaparecer después de la trágica muerte de su vocalista en 1997. Esa banda fue INXS.
Después de que los hermanos Farris encontraron al vocalista ideal para su banda en Michael Hutchence, la historia de INXS cambiaría para siempre. Y aunque su primer álbum tiene fecha de 1981, fue en el año de 1987 gracias a «KICK», su sexta grabación de estudio, que esta banda de músicos australianos llega hasta el punto más alto. Con canciones como las muy movidas New Sensation y Devil Inside, la sensual Need You Tonight hasta las power ballads Never Tear Us Apart y Mistify, INXS logra consolidarse en el plano musical de la época.
Cuando pareciera que su punto más alto no podría ser igualado, en el año de 1990 lanzan el álbum titulado «X», donde la banda que exitosamente había mezclado ritmos como el funk rock o el new wave tiene otro gran éxito en ventas gracias al pegajoso primer sencillo, Suicide Blonde, canción que dicen las leyendas de la música que Hutchence compuso para su novia en aquel momento, Kylie Minogue. Seguido por canciones como By My Side o Dissapear, INXS aprovecharía su momento para salir de gira en lo que se llamaría el Summer XS Tour en el año de 1991 sin saber lo que les esperaba.
Así, en ese verano tuvieron su primer sold out en Wembley ante aproximadamente un público de 74 mil espectadores que desataron la locura una noche de verano al ritmo del pop/rock de INXS. Esta noche memorable llega ahora a cines como un evento especial remasterizado en 4K y convertido del formato de 35mm en pantalla fullscreen a un widescreen con sonido Dolby Atmos que realmente trae de vuelta a una banda que pareciera no ser recordada con la debida justicia que merece en el mundo musical.
Ver de nueva cuenta al carismático Michael Hutchence, sexy symbol y vocalista de INXS trae inmediatamente de vuelta las viejas épocas del rock donde lo más importante era el show, la música y la gente sin tantos elementos de parafernalia distractora como ahora se acostumbra en los grandes espectáculos de esta envergadura. La calidad y calidez de la banda se transmite a través de sus notas, sus canciones y la música que fluye a través de ellos. Es así como podemos observar a todo el público en el mítico viejo estadio de Wembley brincar y cantar, recordando así momentos como el Live Aid y la presentación de Queen, otro contemporáneo ochentero.
El factor nostalgia influye en la experiencia de revivir un concierto de 28 años de antigüedad y permite hacer un viaje al pasado para reencontrarse con clásicos como What You Need, Mediate además de traer los viejos éxitos de la banda de nuevo a la mente y recordar que INXS es una de aquellas agrupaciones históricas que de repente fue olvidada por la generación del siglo 21 debido a la muerte de Michael Hutchence, de la cual la banda nunca se recuperó.
Sin embargo, gracias a la tecnología y a la misma banda, este concierto sin duda es un evento que traerá de vuelta buenas memorias a las generaciones que los vivieron o escucharon en su momento de gloria y presenta además la oportunidad de presentar a una banda con un cantante que derrochaba personalidad y sensualidad, contoneando sus caderas como un Elvis de la época o contagiando sensualidad cual Jim Morrison moderno (curiosamente, Hutchence audicionó para hacer el papel del Rey Lagarto en la cinta de Oliver Stone, Los Doors).
Así, no pueden perder la oportunidad de revivir la velada de 1991 que marcó un antes y un después para la carrera de INXS, ya sea que los conozcas o no. Live Baby Live es una experiencia que incluso el rock/pop australiano conquistó a Londres por una noche en la que Hutchence y su banda lucieron con lo mejor de su repertorio a la fecha.
No se pierdan INXS: LIVE BABY LIVE, evento que a partir del 27 de noviembre se podrá disfrutar en varias salas a nivel mundial como experiencia de una sola noche y que estará en salas exclusivas de Cinépolis este 9 de Diciembre, un recordatorio del legado musical que esta banda dejó y que no debe de olvidarse.